Soy un afortunado… Desde que regresé de un viaje a Brasil, para estar en la casa matriz de mi empresa, he estado en mi casa, en cuarentena, trabajando en home office. Soy un afortunado, realmente, por trabajar en una empresa que nos dió todo para estar en nuestras casas, poder cuidarnos y cuidar a los nuestros, sin ninguna reducción de salarios, jornadas o beneficios. Sé que soy parte de un pequeño grupo de personas que pudo pasar esos días de forma relativamente tranquila, con más preocupación en el bienestar de mi familia y el mío. Eso me hace recordar una frase que escuché hace poco, estamos en la misma tempestad, pero no en el mismo barco. Muy pronto regresaremos a nuestras oficinas, los que todavía tenemos la situación de empleo formal. Seguramente será un nuevo normal, ya con las nuevas reglas de sana distancia, sin tanto contacto físico y menor cantidad de personas en un mismo espacio. 

Pero todo eso nos ha dejado mucha enseñanza. Mucha cosa fue aprendida en esas semanas tan diferentes, únicas, que hemos pasado…

Una de ellas es el home office… algo que yo particularmente no creia, para nada. Pude ver que sí funciona, que mi equipo estuvo más productivo que cuando estábamos todos en las oficinas, y que es posible mantener la conexión con el equipo mismo que estemos todos distantes fisicamente. Juntos identificamos las mejores formas de acompañar el trabajo de cada miembro del equipo, también de obtener los estatus de las actividades en desarrollo. Pudimos ver que hoy tenemos más interacción que antes, solo que de forma virtual, pero muy efectiva. Elaborar una estrategia para mantener el Home Office una vez finalizada la cuarentena ya es necesario. Tenemos un nuevo normal formándose y hay que estar en la vanguardia de él, no esperando para descubrir después cómo la gente va a trabajar en ese nuevo normal. Piénsalo hoy, arma tu estrategia de trabajo desde casa ya!

También he aprovechado mucho esos días para adquirir conocimiento. Hay (todavía) una cantidad enorme de nuevos contenidos online disponibles, las lives de mucha gente buena que comparte su conocimiento de forma gratuita. Capacitarse siempre es necesario y en esos días hubo un crecimiento importante en la cantidad y en la calidad de las capacitaciones gratuitas disponibles. Seguramente eso se quedará para el futuro! Arma ya un plan de capacitación y formación para seguir esa evolución de tu conocimiento y, porque no, de tu carrera.

El nuevo normal ya se acerca… enfócate también en identificar si toda tu plataforma tecnológica está adherente a esa nueva forma de llevar la vida (tanto personal, como laboral). Tu empresa tiene que estar 100% conectada (procesos, ventas, comunicación con los clientes y colaboradores). Ahora es punto com o punto fuera! Acércate a tu aliado de tecnología y empieza a armar un plan para crecer esa presencia digital, desde ahora…

Muchas cosas van a ser diferentes, pero espero (y creo mucho) que todas las cosas buenas que aprendimos en esos días se queden por siempre… hablar con la familia distante por internet, hacer una video llamada con tus queridos, interactuar más con los que están distantes… eso no tiene que acabar con el regreso de las actividades! Es complementario, integra y mantiene a nosotros más unidos…

Aprendamos, ahora, a vivir ese nuevo normal!